domingo, 30 de septiembre de 2012

Vida y muerte de uno más

- ¡No se salga de la fila, Rodríguez! ¡Más rápido, García! Por el amor de dios, Palenzuela, ¿cuántas veces tengo que decirte que cojas sólo lo que puedas cargar? Apunta otra penalización a tu cuenta.

El Gerente. Siempre con su mal humor, sus gritos y sus penalizaciones. En la comunidad todos le odian, pero a ver quién es el valiente que se atreve a responderle otra cosa que no sea "Sí, señor.". Yo, desde luego, no. Necesito este trabajo para pedirle matrimonio a Cris, no quiero condenarla a una vida de miseria sólo por amor. Nos destrozaría a ambos. Cojo semilla, paso semilla, cojo semilla, paso semilla. Es una labor repetitiva y aburrida, pero al menos estoy en las galerías y no ahí fuera, expuesto a pisadas de humanos y perros y a la lluvia que mató a Mario... Un inconveniente de este trabajo es que tengo demasiado tiempo para pensar, intentaré limitarme a centrar mi atención en él.

(...)

Bueno, hoy por lo menos el Gerente no me ha echado ninguna bronca, prefiero no destacar de ningún modo, no puedo perder este trabajo ahora. Bien, parece que no llueve, voy a salir a coger la semilla más grande que encuentre para dársela a Cris como regalo. ¿Cómo puedo proponerle matrimonio? Hmm... ¿Qué tal un? Cristina, ¿quieres casarte conmigo? No... demasiado común. ¿Quieres compartir el resto de tu vida conmigo? Demasiado cursi. ¿Qué tal si te vienes a mi casa, pedimos una pizza y te quedas a dormir? Hoy, y mañana, y pasado, y al otro. Sí, ese es más mi estilo. Estoy deseando ver la cara que pone cuand.

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